Padre Arsenio, 1893-1973: Sacerdote, Prisionero, Padre Espiritual por AlexanderMy rating: 5 of 5 stars
La lectura de Padre Arsenio, 1893-1973 fue mi primera inmersión en la iglesia rusa bajo el régimen estalinista de la primera mitad del siglo 20 a través del relato biográfico de un hombre excepcional.
Padre Arsenio, cuyo nombre antes de ser ordenado sacerdote fue Piotr Andreyevich Streltzov, ejerció su vocación religiosa como pocos ante la horrible realidad de la persecución religiosa y política que caracterizó a la Rusia de Stalin. Antes de ser sacerdote, Padre Arsenio fue un conocido académico e historiador del arte y la cultura rusos. Nadie en su sano juicio hubiese podido acusarlo de traidor de su patria o de tener tendencias "contra-revolucionarias". Por el contrario, en sus muchas discusiones sobre Rusia, su amor por su país era innegable y su conocimiento de las raíces del arte y la iglesia rusos arrojaba luz sobre la maravillosa cultura de un país cuya gente fue robada de una rica herencia eclesiástica milenaria bajo la represión comunista.
Padre Arsenio, el hombre, sorprende por su valentia ante la adversidad, por sus dotes como pastor, por su alto grado de justicia y por su fe inquebrantable. Su instinto pastoral producto de años de dedicarse al cuidado espiritual de personas bajo su encargo ministerial sorprende por lo acertado de su discernimiento y la sabiduría con la que lo aplica. No había visto de cerca un toque pastoral tan fuerte e impactante como el de Padre Arsenio.
Padre Arsenio sorprende por la innumerable cantidad de hijos espirituales que dejó e impactó a través de su ministerio. Sin importar la situación del penitente, la gracia extendida por Padre Arsenio a todos era como si Dios mismo estuviera tratando directamente con la persona. La vida de Padre Arsenio se distinguió por su dedicación a la oración constante cuya eficacia lo ayudó a sobrevivir repetidamente las circunstancias del campo de prisioneros bajo Stalin y luego bajo la continua vigilancia de los agentes del estado. Sin la oración, el relato biográfico que hoy podemos disfrutar de Padre Arsenio no existiría.
Mi lectura de Padre Arsenio me ayudó a apreciar y conocer mucho más a fondo a la iglesia ortodoxa rusa que a pesar de una persecución increíble por parte de las fuerzas opresoras del poder político soviético se levantó y permanece hoy como una iglesia fuerte y orgullosa de su herencia y tradiciones cristianas mucho más antiguas que las de muchas otras iglesias.
Recomiendo este libro a todo el que desee conocer más de la persecución de la iglesia en la Rusia de Stalin. También se beneficiarán mucho los que quieran apreciar mejor la gran herencia cultural rusa. Pero quienes más disfrutarán y se beneficiarán de este libro son aquellos que comparten con el Padre Arsenio la vocación de ser pastores y guías espirituales de otros. Padre Arsenio es un estándar de la vocación sacerdotal muy alto y es por eso mismo que es un modelo seguro a seguir.
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