como todos los días de nuestro pasado
en un día lluvioso
que confundió nuestras lágrimas con su danza
ahora ese pasado es mi presente sin ti
y aunque ya no hay tantos días nublados
sigue lloviendo en mí
camino con tu sombra agarrada de mi mano
y me pregunto si mi alma te acompaña
mientras duermes, cuando ríes, cuando callas
convertida en la gran pregunta
dejaste atrás mi puerta abierta
anhelando escuchar la voz
de tu regreso, pero te fuiste
sin respuesta, sin aliento
me dejaste mi pasado presente
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